Mérida
Tiro por la culata a Primor
En lugar de corcholatas ¡puras fichitas!
Por El Cazador Nocturno
En su desesperación por mandar un mensaje sobre una gran alianza electoral que se gesta en Yucatán para frenar al puntero de todas las encuestas a la gubernatura, el panista Renán Barrera Concha, al partido Morena le salió el tiro por la culata con la comida que una de las “corcholatas” presidenciales, Adán Augusto López Hernández, tuvo con una chusma política que los yucatecos creían muertos y enterrados.
Rostros, nombres con apellidos y el hedor de la vieja corrupción priista, hoy estratégicamente camuflada con otras siglas y colores, salpicó la estrategia electoral de Morena y, en particular, a los grupos que encabezan Adán Augusto a nivel federal y Joaquín Díaz Mena, a nivel local, y su alianza con la podredumbre de la política yucateca.
La ya célebre comida de la lujosa exhacienda San Juan Opichén, revivió no sólo a los muertos políticos, sino también un pasado que los yucatecos pensaban enterrado y mandó un mensaje claro al electorado: la alianza de Morena con el símbolo de la corrupción Angélica Araujo Lara, exalcaldesa meridana que se mantiene como peón de Ivonne Ortega Pacheco al abordaje de los cargos públicos que estarán en juego en los comicios de 2024.
Desde el 6 de enero de 2022, Araujo Lara hizo pública su cercanía con Adán Augusto, su compañero en el senado de 2012 a 2018, cuando aún ambos eran priistas. Pero en los últimos meses, apostando al olvido de los meridanos del saqueo a las arcas municipales a través de obras faraónicas como la reconstrucción del Centro Histórico, el paso deprimido y el cambio de luminarias por lámparas chinas, entre los casos más notables, la ivonnista se presenta como opción de renovación ética de la vida pública en la entidad. ¡Hágame usted el recavor fabrón!
En los últimos días, en entrevistas pagadas en portales a modo, Angélica Araujo promueve una gran alianza electoral, al igual que otros de sus compañeros como Mauricio Sahuí Rivero y hasta el propio Francisco Torres Rivas, quien se aferra ilegalmente a la presidencia estatal del PRI.
“En las condiciones actuales, ningún partido gana solo, pero el PRI menos. Somos un partido importante pero hoy todos necesitan alianzas”, justifica.
En los altos mandos de Morena, la reacción a esa pifia fue inmediato. Se ordenó guardar mutis al cónclave de Adán Augusto con la chusma política yucateca, para no afectar la imagen de un partido guinda que dice luchar contra la corrupción y la mentira.