Mérida
Ni la cuenta regresiva para elegir al bueno del PAN a la gobernatura le quita lo tramposo a Libo
Por El Vigilante Nocturno
El Comité Ejecutivo Nacional del PAN aplicará en la entidad una consulta a la población abierta (no es un proceso cerrado a su militancia) los próximos días 11, 12 y 13, y el martes 15 presentará los resultados. Calculador de los tiempos y chapucero, como ha sido siempre, Liborio Vidal Aguilar, delfín del gobernador Mauricio Vila Dosal, concentra su campaña en una estrategia casa por casa para obtener ventaja.
De nuevo recurre al chanchullo y la marrullería con la hasta ahora desconocida revista “C+” (Cuéntame más), la misma con la que inundó las carteleras de las principales avenidas y cruceros de Mérida. Aunque en las lonas se anuncia a todo color, la campaña casa por casa incluye una hoja en blanco impreso en blanco y negro.
En una cara tiene completa una seudoentrevista e incluye dos fotos. La otra cara consta de cuatro impresiones, de modo tal que al doblar el papel en cuatro rectángulos el tríptico tiene como portada la misma imagen de las lonas de la campaña del chapulín vallisoletano, en contraportada una sopa de letras que incluye nombres de 16 municipios yucatecos. Aunque la portada anuncia para la página 2 el reporte “El tráfico llegó a Mérida”, en realidad tiene “El viaje del queso de bolsa a Yucatán”. Finalmente, lo que conforma la página 6 del tríptico es una nota sobre “Tren maya: ¿nos ayuda o perjudica?
Así fue el despertar de las familias de Pacabtún, Fidel Velázquez, Los Reyes. En sus puertas o en sus portones, un ejército de muchachos dejaba los trípticos. “No somos de ningún partido, simplemente somos empleados de una empresa de publicidad”, explicaban los jóvenes a los colonos que preguntaban del origen de los recursos invertidos en la nueva campaña territorial. Seguramente creen estos jovencitos que la gente todavía se chupa el dedo.
Desde hace varios meses, con total impunidad otorgada desde palacio de gobierno, aseguran quienes saben, el secretario de Educación, Liborio Vidal ha escrito una histórica página sobre su libro titulado “Cómo ser panista y violar sistemáticamente la Ley Electoral” con cuantiosos desvíos de recursos públicos (dinero, equipo, personal) a la promoción personal del consuegro de la secretaria de Gobierno, María Fritz Sierra.
La doña ha participado activamente, a oscuras, detrás de la campaña de su consuegro. No es casual que haya sido desestimadas todas las denuncias por la violación de los tiempos electorales y, sobre todo, al artículo 134 Constitucional que prohíbe la promoción personal con recursos que se deben destinar a la promoción institucional, en este caso, a la educación y el quehacer de la Segey.
Apenas la semana pasada, un grupo de mujeres presentó denuncias acompañadas de evidencia notariada, por las campañas anticipadas, en una violación a los principios democráticos, en el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (Iepac). De inmediato el teléfono rojo sonó para ordenar que no se reciba esa denuncia. Finalmente, el pretexto, por increíble que suene, fue que, en plena efervescencia preelectoral, ese instituto está de vacaciones. Súmele a esa, la interpuesta el día de ayer por el PRI.
Cínicos y públicos condicionamientos laborales por parte de alcaldes y “lideres” sindicales para los acarreos, reparto masivo de vales de gasolina, de tortas, de desayunos, entrevistas pagadas y un descarado dispendio en lonas, bardas y redes sociales marcan la campaña anticipada del expriista.