Portada
Gaspar Polanco: el pintor más caro de Umán
Lo único que se le exige a “Venturita” de su viaje a Querétaro, es que su informe sea serio, porque ya nos ha demostrado que, aunque es muy mal pintor de brocha gorda, es muy bueno para pintarle a los umanenses promesas que sólo quedan en el lienzo de lo intangible. Sus imaginativos, coloridos y felices cuadros son muy bellos, pero sólo se quedan en eso: pura verborrea, postureo para el Facebook y cero resultados
Por Fernando A. Toledo y Rivadeneyra
En eso se ha convertido el alcalde de Umán: en un pintor que le cuesta mucho dinero a los umanenses. El actuar “poser” de “Venturita” ciertamente no es exclusivo de él: lo vemos en los políticos que se sumergen hasta la cintura en charcos de agua, en los que comen tacos de chicharrón con los obreros que construyen una calle, también en aquellos que chapean parques públicos y en los que se meten entre las rejillas de los drenajes fingiendo que desazolvan. En fin, todo postureo que sirva para subir la foto al Face para demostrarle al pueblo que “¡Yo sí trabajo…!”
Que “Venturita” tome una brocha y se ponga a pintar parques en Tebec es lo de menos, pero que utilice su valioso tiempo para hacer eso, en lugar de planear cómo resolver los gravísimos problemas que afectan a Umán y sus comisarías afecta a todos.
Al alcalde, a los regidores y a los directores el pueblo les paga para gestionar y planear, no para ejecutar. Ellos son los gerentes que deben estar pensando cómo sacar al municipio de la miseria, no chapeando, tapando baches o pintando.
Y no es que yo esté en contra que el alcalde haga talacha de cuando en cuando, pero me parece que es mucho más importante que, por ejemplo, informe públicamente sobre la agenda de su viaje a la ciudad de Querétaro. Yo supongo que ese viaje era de suma importancia para el futuro de Umán, pues recordemos que el mismo Gaspar ya nos dijo que no hay recursos para bachear, así que Gaspar tiene que justificar plenamente con resultados concretos tangibles a qué fue a Querétaro.
Lo único que se le exige a “Venturita” es que su informe sea serio, porque ya nos ha demostrado que, aunque es muy mal pintor de brocha gorda, es muy bueno para pintarle a los umanenses promesas que sólo quedan en el lienzo de lo intangible. Sus imaginativos, coloridos y felices cuadros son muy bellos, pero sólo se quedan en eso. Pura verborrea, postureo para los plausos en el Facebook y cero resultados, aunque a diario los umanenses se quejen de las calles llenas de baches y que estos hoyancos causen accidentes viales un día sí y al otro también.
No hace falta tener una memoria prodigiosa para recordar que hace seis años Freddy Ruz hacía exactamente lo mismo que ahora hace “Venturita”: ir a los fraccionamientos y comisarías a “embellecer” sus parques y calles para que, una vez electos los delegados municipales que a él le convenían, dejar todos eso lugares en el más completo de los abandonos.