Portada
Época de vacas flacas en el PRI Umán

El tricolor no tiene más opción que: un toro flaco y débil; además de las mismas ratotas de siempre.
Por lo visto el “Proyecto Umán” no presenta nada nuevo y como se acerca finados tal vez ya nació muerto.
Por: Daniela C. Canul
De verdad que el PRI Umán no tiene ni la más mínima idea de qué hacer con sus candidatos para la próxima contienda electoral del 2021. Al parecer, sus cartillas nuevas, pero ya están más viejas que nunca, son: un toro flaco, débil y carcomido por el tiempo; además, las mismas ratas de toda la vida, pero ahora, se jalaron a la más grande, una ratotota que dice trabajar para el pueblo yucateco, pero solo busca engrandecer sus bolsillos, luego les decimos quien Ramírez Marín es.
Comenzamos con el Torito Pech, un personaje bastante curioso. Busca posicionar su poca popularidad en la ciudad de Umán, dejándose manipular por un mal referente de la política umanense, pues se habla de que su coordinador de campaña es el mal conocido Manuel Carrillo, quien, con tan solo mencionar su nombre, se viene a la mente traiciones y robo; no cabe duda que en octubre comienza a salir el olor a muerto. Toro, piensa que dejar repletos los mototaxis con sus logos e identidades, basta para hacer buena política. Lo que no sabe el pobre, es que solo está gastando dinero a lo buey, ¿gracioso verdad?
Pech, junto con su Proyecto Umán, se han encargado de mal nutrir la política, con gente que no vale la pena en lo absoluto. Ya sabemos cuál es el destino de los toros flacos, ¡se van directo a los leones! Pobrecito, que mejor le digan que se vaya a seguir haciendo sus muebles de madera, esos le salen bien, eso de jugar al político no es para él.
Ahora, en cuanto a las ratas que andan merodeando el corral del Toro, se dice para tirarlo, están las mismas de siempre: “La Nena Castío” quien tiene pensando lanzar a su hermanita Marisol (hago una pausa aquí para pregunta ¿y esa quien es, ustedes la conocen?).No quiere soltar la chamba fácil, como no pudo ser presidente de la mesa de diputados, pretende mamar de la ubre pública de por vida y para ello, sus estrategias, malísimas por cierto, en lugar de ayudarlo, solo hacen que quede peor de lo que ya se ve.
“La Nena Castío” está más desesperada, perdón, más desesperado que nunca. Ya quemó todas sus cartillas, sin embargo, no se rinde y él quiere poder político y público por encima de todos. A él, le vamos a decir: ¡ya siéntese señor!
¡Ay que cosas con el PRI en Umán! Como siempre, un poco más de lo mismo de siempre. Y el peor error que pueden cometer los nuevos suspirantes, apoyarse de muertos que apestan a podrido y que pudren todo lo que toca.
