Progreso
Albergue de Ancianos “San Joaquín” cumple 45 años de vida
Progreso.- El pasado mes de mayo el Albergue de Ancianos “San Joaquín” de este puerto cumplió 45 años de vida.
Está situado en el corazón de la ciudad, muy cerca del mar donde las personas de edad avanzada puedan vivir en paz. atendidos por una congregación de Madres dedicadas al cuidado de enfermos y personas de la tercera edad, de la congregación “Hijas Mínimas de María Inmaculada”.
Su principal misión es darles hogar a los ancianos desprotegidos o que por alguna razón no puedan vivir con sus parientes. El albergue es una organización con fines no lucrativos y solventa sus gastos a través de donativos particulares.
El nombre oficial es el Albergue del Anciano en Progreso, A.C., pero es más conocido como Albergue de Ancianos San Joaquín. En la actualidad hay 55 residentes. Estos ancianos son personas que, en su mayor parte, son saludables cuando entran, pero por su edad ya no pueden cuidar de sí mismos. Sus familias, por varias razones, no pueden ayudarles, aunque muchos de los residentes simplemente no tienen familia en absoluto.
La mayoría de los residentes son de Mérida o del interior del estado y han sido llevados al refugio por alguien, pero también hay casos en que se encuentra a la persona en un estado desesperado de necesidad.
El albergue tiene un acuerdo con el hospital Agustín O’Horán en Mérida para cuando los problemas de salud requieren hospitalización.
Cabe recordar que este albergue que se encuentra ubicado en la carretera de Progreso a Chicxulub Puerto, fue construido por iniciativa del presbítero Joaquín Ricalde (+) debido a la imperiosa necesidad de ayudar a las personas de la tercera edad que vivía de la pesca y que en su mayoría eran de muy escasos recursos económicos, no podían sostenerse por sí mismos o bien no contaban con algún familiar que se hiciera cargo de ellos.
Debido a esta situación se constituyó el 26 de mayo de 1975 el Patronato Albergue del Anciano en Progreso, A.C. sin fines lucrativos y con el objeto social de promover ayuda externa para sostener esta casa hogar para ancianitos y proporcionarles albergue, alimentación, ropa, atención médica y medicamentos.
Actualmente cuentan con un promedio de 55 ancianitos de ambos sexos que son atendidos por las Hermanas religiosas de la congregación de “Hijas Mínimas de María Inmaculada” que con gran amor, entrega y dedicación desarrollan un trabajo ejemplar.