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Umán, cuna del fascismo moderno, Ruz Guzmán con complejo de Mussolini
Umán se convierte en la cuna del fascismo moderno, al grado que el alcalde Freddy Ruz Guzmán pretende arrestar a toda la población que esté en contra de sus ideales, sin importar su edad o género, bajo el enfermizo pretexto de que son “un riesgo para la salud de los habitantes”.
El complejo de Mussolini se apodera del edil panista, paranoia que aumentó de manera acelerada ante la presencia del coronavirus 2 del Síndrome Respiratorio Agudo Grave (SARS-CoV-2) causante de la enfermedad Covid-19, por lo que con su “estrategia de prevención” pone en riesgo a la población, de tal manera que se prevé un aumento del número de personas infectadas, y de defunciones provocadas por la pandemia.
La actitud del presidente municipal cambió de manera radical el pasado lunes 27, tras la detención de Christian Rey R. S., imputado por el delito de robo calificado cometido en pandilla, en el fraccionamiento Hacienda Itzincab, de Umán, cometido en una camioneta del Gobierno del Estado que llevaba más de 100 despensas alimentarias.
Hoy, con una actitud totalitaria y antidemocrática, posturas propias del fascismo, prácticamente estableció un toque de queda, violando las garantías individuales de los ciudadanos, violando de manera flagrante el artículo 29 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, al mismo tiempo que fomenta la coerción.
A través de un video, Ruz Guzmán sentenció: “Personas que sin ningún motivo estén fuera de su casa, después de las nueve de la noche, se procederá un arresto administrativo, principalmente para jóvenes y niños”.
“Si en ese momento son llevados a la policía municipal en carácter de presentados para ponerles su arresto administrativo, si son menores de edad, se presentan sus padres de familia, de forma prepotente y grosera faltando a la autoridad, serán acreedores a arresto de 24 horas”, continuó el frustrado político.
De manera inmediata, fueron diversas las reacciones ante tal postura, cuestionando si la cárcel pública será suficiente para poner a decenas de detenidos.
Al mismo tiempo, la cárcel pública se convertirá en un foco de infección de Covid-19, ya que habrá hacinamiento.
Lo peor de todo, estas decisiones del edil estarán avaladas por el gobernador Mauricio Vila Dosal.