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¿Los diputados yucatecos al servicio del pueblo o serviles de Freddy Ruz?

Cientos de voces ciudadanas en Umán dicen NO a esa deuda, no porque no quieran un Umán con mejores servicios, sino porque temen que, de nuevo, Freddy se robe ese dinero.
Por Consejo Editorial
Servil
Del lat. servīlis.
1. adj. Perteneciente o relativo a los siervos y criados.
2. adj. Que de modo rastrero se somete totalmente a la autoridad de alguien.
La actuación de los diputados de la Comisión de Presupuesto, Patrimonio Estatal y Municipal ante la comparecencia del alcalde panista Freddy Ruz en el congreso, el pasado jueves, no fue de pena ajena, sino lo que le sigue. La intervención del alcalde hablando de panuchos y de cosas triviales y sin importancia sí fue de pena ajena, pero “nuestros flamantes” diputados no quisieron ser menos y, entre todos, montaron un espectáculo que no llegó ni siquiera a ser parodia del teatro cómico regional porque, en lugar de generar la risa, el asunto estuvo para llorar.
Esa sesión demuestra totalmente, que los diputados y Ruz Guzmán viven en su propio mundo. Ellos habitan en un lugar parecido a un Olimpo, muy por encima y lejos de una chusma, a la que sólo se dignan a visitar en tiempos de campaña política para prometer que sus “divinas” intervenciones, ahora sí, van a favorecer al populacho a cambio de votos. Tan es así que los dioses olímpicos de nuestro x’tocoy solar cayeron rendidos ante la mirada pizpereta del alcalde umanense y hasta lo endiosaron. Las sillas vacías que se aprecian en la transmisión en realidad estaban ocupadas por el ego del panista Freddy Ruz que, si de por sí ya es enorme, esta vez ocupó mucho espacio extra.
El primero en rendirle pleitesía fue Alejandro Cuevas, el diputado del PRD, a quien solo le faltó llevarle un ramo de rosas a Freddy y pasar a tomar una tacita de café, como el profesor Jirafales y Doña Florinda. Cuevas no tuvo empacho en felicitar al alcalde por su “valentía” para emitir un vídeo, en la red social de Facebook, para “informar” a los umanenses sobre el préstamo. Lo que el diputado perredista no vio, quizá porque no le interesa y para él no tiene importancia, son los cientos de comentarios que siguieron al mentado vídeo vertidos por los umanenses en donde, por unanimidad, expresan su rotundo NO a ese préstamo. Claro, no se esperaba menos de Cuevas pues ¿desde cuando le interesa a él representar al pueblo cuando su diputación la “ganó” por dedazo y se la debe a su partido, no al voto popular?
Las damas de naranja, Silvia López y Milagros Romero, también quedaron “encantadas” y en el colmo del cinismo, o de la ineptitud ocasionada por la ignorancia… o las dos cosas, hasta alabaron el “catálogo de obras” presentado por Ruz Guzmán sin siquiera querer percatarse que en realidad esa es la muestra de la desatención, el atraso y el deterioro en el que el alcalde panista tiene sumergido a Umán desde hace más de cuatro años. Pero eso a ellas no les importa, pues nunca han caminado por esas calles umanenses oscuras y llenas de baches. Tampoco saben lo que significa quedarse sin servicio de agua potable por días y de manera continua. Mucho menos saben, porque no les interesa, que esa problemática que Freddy les presentó no es nada nuevo, tan no es nada novedoso que fueron su tema durante su primera campaña política. Silvia y Milagros se perdieron en los ensoñadores ojazos del primer edil panista y nunca le cuestionaron por qué no resolvió esos problemas desde antes. Al ignorar las voces de los ciudadanos de Umán, las administradoras de Movimiento Ciudadano, S.A. de C.V. ya dejaron muy en claro que, su movimiento, de ciudadano nada tiene, salvo la mención en el membrete.
Curiosamente… o quizá no, pues a lo mejor fue el papel que le tocó en guion, el único que hizo las preguntas interesantes fue Enrique Castillo, sin embargo, Freddy Ruz las evadió y jamás contestó que mecanismo va a utilizar para que, efectivamente, los recursos que está solicitando beneficien a los trabajadores umanenses y no a los que las compañías constructoras quieran. El presidente de la Comisión en cuestión, el también panista Víctor Merari, entró al quite y con displicencia y tácita complicidad permitió al alcalde su silencio al respecto y ya no permitió que Castillo preguntara de nuevo.
Pero quizá la pregunta no se la debieron hacer a Freddy, sino a la regidora Morenista Sofía Castro, pues es un secreto a voces entre los muros y pasillos de palacio municipal de Umán que es ella quien elaboró la “propuesta” presentada por Freddy y es ella quien asigna las obras públicas en Umán. Recordemos que el actual director de obras públicas del ayuntamiento umanense es Carlos Jesús Sánchez Rodríguez, quien era un hombre de confianza en la constructora propiedad del hermano de Sofía Castro.
El único que se fajó los pantalones y puso el dedo en la llaga fue el priista Marcos Rodríguez, pues la “propuesta” hecha por Sofía Castro… ¡perdón!… la “propuesta” presentada por Freddy Ruz, carece de un elemento indispensable para ser aprobada: una corrida financiera. Ni Freddy ni los diputados saben a cuanto va a ascender la totalidad de la deuda y también desconocen las condiciones en las que esta se contraerá. La palabra de Ruz Guzmán que se buscarán las mejores condiciones no es justificación, ni fundamentación legal, y la sola falta de esta corrida financiera es más que suficiente para rechazar la solicitud, pues al ignorar la cantidad final y las condiciones de la deuda que se va a contraer, los diputados dejan a los ciudadanos de Umán en total indefensión, pues finalmente son ellos los que, de una u otra forma, terminarán pagando la deuda y los daños colaterales que esta representará. De avalar esta solicitud los diputados estarían aprobando algo que, a todas luces, es ilegal por desconocerse a cuanto asciende el monto total a pagar y que clase de compromisos avalados por los recursos públicos de Umán se contraerán.
Como en esta comparecencia los diputados demostraron ser unos ineptos y/o convenencieros, además de huevones, les hicimos su trabajo: ¿qué opina la gente de Umán al respecto? ¿Los umanenses están de acuerdo con que se contraiga esa deuda millonaria?
Primero hay que dejar algo muy claro: por supuesto que la gente quiere calles pavimentadas sin baches y que no se inunden tras cada chubasco; también quieren un buen alumbrado público y un servicio de agua potable digno. Lo que los umanenses no quieren es que Freddy contraiga una deuda porque por experiencia propia, pues ellos lo viven cada día, saben que ese dinero será malversado. Los diputados de esta comisión parecen ignorar la diferencia ente “aprobar las cuentas públicas”, que es lo que ellos hacen a ojos cerrados, y “transparentar las cuentas públicas” que es lo que el pueblo demanda. Ahí están, en los diferentes grupos de Umán de Facebook, los cientos de voces ciudadanas que dicen NO a esa deuda, no porque no quieran un Umán con mejores servicios, sino porque temen que, de nuevo, Freddy se robe ese dinero. No lo decimos nosotros, ni quien esto escribe, pueden los diputados, si es que les da la gana y se pueden sustraer del “encanto” del alcalde umanense, pasarse por esos grupos y enterarse del sentir de esos cientos de ciudadanos. ¡Hagan su trabajo, aunque sea por una vez en su vida, por el amor de Dios! Es cuánto.
