Crece el número de negocios dedicados a la venta de comida

Progreso.- Desde hace un buen tiempo a la fecha, negocios dedicados a la comida han aparecido por todas partes como una forma de ganarse el sustento diario de las familias porteñas.

De este modo sería conveniente que hubiera mayor vigilancia sanitaria en algunos establecimientos donde se expenden alimentos de diversas clases, como el caso de las carnes asadas, tortas, tacos o pollos asados, sobretodo en estos tiempos de pandemia por COVID-19.

Es importante que las autoridades aplicadas en materia de la salud expidan oficios como medio de exhortar a los propietarios de dichos establecimientos para indicarles no olvidar ciertas normas que estos deberían respetar como el uso de implementos (gorros, tapabocas), contar con agua potable y no manejar el dinero si se prepara y se sirven alimentos.

Durante un recorrido por distintos puntos del puerto, donde se ofrecen alimentos o bocadillos, como el caso de tortas de asado y empanizado hasta los hechos con pescados o mariscos, se constató que en algunos casos estas normas no se respetan y los propietarios señalan el no haber recibido ninguna advertencia sanitaria o bien el justificarse al decir que cuentan con sus respectivos permisos de salud.

Varias personas dedicadas a este tipo de negocios han dicho con anterioridad que sus establecimientos están regularizados desde hace años y que siempre que la ocasión lo amerita tratan de cumplir con los requisitos y reglamentos en cuanto a salud se refiere.

No obstante, el caso de algunos puestos que ofrecen sus productos a la intemperie, expuestos muchas veces a la luz del sol, polvo o contaminación, producido por el constante paso de vehículos en las zonas donde estos puestos se encuentran establecidos, indica que, en realidad, no se cumple con los requerimientos en materia de salud o higiene.