Mérida
Saneamiento en el ISSTEY deberá revisar anomalías en el sindicato, hoy bajo control de un ‘junior’

Por El Cazador Nocturno
Hay inconformidad porque perviven los manejos del joven heredero José Manuel González Buenfil, quien viola la ley para aferrarse a privilegios.
Las sombras de la ilegalidad y corrupción se desnudan en el ISSTEY por las denuncias que diputados del PAN interpusieron contra seis ex directores de los últimos 12 años, por abuso de autoridad y ejercicio indebido de recursos públicos.
Añadida a esas anomalías, se encuentra la amañada forma en que el joven José Manuel González Buenfil “heredó” el sindicato de su padre. Poco antes de morir, José Manuel González Quintal movió las fichas sindicales para que su hijo se quedara al frente de dicha organización, como si se tratara de una herencia familiar.
Aplicado para moverse de forma ilegal, el joven “heredero al trono” se presentó como el nuevo líder del sindicato del ISSTEY y, de manera jurídicamente inexplicable, obtuvo en cuestión de días la toma de nota del Tribunal de los Trabajadores al Servicio del Estado y de los Municipios, cuya presidencia se encuentra acéfala desde hace varias semanas.
Luego de que diputados panistas denunciaran, ante la Auditoría Superior del Estado, a seis ex directores del ISSTEY de los últimos 12 años por abuso de autoridad y uso indebido de recursos públicos, la lupa jurídica incluye también a la ilegal directiva sindical que preside el joven “heredero” González Buenfil. Pero también a sus cómplices del Tribunal que, a cambio de mordidas, facilitan como fotocopias cuantas tomas de nota les soliciten, señalan inconformes hoy preocupados por la frágil situación de ese organismo y añaden que circulan en los corrillos sindicales mucha información relacionada con la red de corrupción en la que intenta aferrarse González Buenfil en el sindicato del ISSTEY.
En esto -dicen los quejosos- se involucra directamente al secretario de acuerdos en funciones de magistrado, Rafael Omar Ferriol González.
“Si se pretende limpiar, de una vez por todas, el cochinero del ISSTEY en esta labor también se debe incluir al sindicato, sobre todo, al que hoy trata de mantenerse parado sobre la ilegalidad”, remataron los inconformes.
