Mérida
Pésimo servicio brinda el Centro de Justicia a la Mujer, denuncia OCNF

Pese la importancia del Centro de Justicia a la Mujer, el servicio que brinda es pésimo, afirmó la titular en Yucatán del Observatorio Ciudadano Nacional de Feminicidio (OCNF), Adelaida Salas Salazar, quien lamentó el desinterés del gobierno del Estado para corregir tal anomalía.
Remarcó que son numerosas las anomalías que prevalecen, motivo por el cual se emitieron diversas recomendaciones.
Lamentó la falta de un mejor servicio a las usuarias, pues la labor que antes se realizaban en un lapso de cuatro horas, ahora se tardan entre seis y ocho horas.
Enunció también la ausencia de una médico, para brindar la atención adecuada a las afectadas, además que se carece de una máquina de rayos X, es decir, no se cumple con la recomendación.
“Todas las recomendaciones emitidas han quedado dormidas”, enunció la activista, y afirmó la necesidad de establecer medidas para proteger la integridad de las yucatecas.
En torno al Comité de Protocolo de Feminicidio en Yucatán “está cojo y tuerto”, reprobó la ausencia de profesionales en dicho delito y la incorporación de asociaciones civiles “extremistas”.
Resaltó que la OCNF lanzó una recomendación en torno a la instalación de dicho Comité, ante las arbitrariedades cometidas.
“El comité debe estar integrado por expertas, pero no se lanzó una convocatoria pública, motivo por el cual el Observatorio Ciudadano quedó fuera, pero se aceptó la participación de la asociación Vida y Familia (Vifac), que nada tiene que ver en el tema”, abundó la declarante.
Asimismo, Salas Salazar consideró que actualmente, la Ley de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia es letra muerta en el Estado, afirmó.
Aseguró que actualmente, se encuentra en el séptimo lugar nacional en materia de violencia en general, por lo que consideró de urgente el atender los sitios en los que esta se genera.
“Ya habíamos logrado que la violencia se visibilice, que entiendan que en Yucatán sí hay violencia, que no necesitamos un helicóptero, un yate para combatirla, que la violencia está en la casa o en las escuelas”, reiteró.
Sugirió a las autoridades a tomar cartas en el asunto para garantizar la prevención y, sobre todo, la atención de las víctimas para garantizar el combate a este flagelo.
Comentó que “antes de la solicitud de la Alerta por Violencia de Género, en Yucatán no había violencia, ni feminicidios, es decir, nada ocurría, todo era amor, dicha y paz”.
Pero, de manera inmediata fue notable la participación de la mujer al denunciar las agresiones de las que son víctima, es decir, “se empezó a visibilizar que en Yucatán hay violencia”, motivo por el cual se empezó a establecer programas de prevención y detección oportuna de la violencia.
La labor efectuada permitió la instalación de la Secretaría de Mujer, “si bien es cierto que implementa acciones, pero no hace lo que debería hacer”, subrayó.
