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El ayuntamiento de Umán no limpia ni para recibir a los fieles difuntos
Las tradiciones yucatecas marcan que, cuando es día de muertos, todos y cada uno de los rincones que solían visitar en vida los fieles difuntos deben mantenerse limpios en su totalidad, eso incluye las calles, sitios y rincones públicos, sobre todo el cementerio. Al parecer, ni eso respetan los empleados del ayuntamiento de Umán.
Empecemos por comentar que en estas fechas el cementerio municipal de Umán es muy concurrido por la gente que asiste a hacer limpieza, llevar flores y otras cosas a las tumbas de sus familiares, por lo tanto, se acumula más basura de la que se genera normalmente. Y ¿qué cree? Sí, a los empleados del campo santo, ayuntamiento o encargados de mantener limpio el lugar, les ha válido (como todo en esta administración) y tienen los basureros del cementerio llenos de restos de flores, coronas funerarias, entre otros deshechos, que no sólo incomoda a los visitantes, sino que también deja malos olores y no es ni sano ni bien visto que en un lugar donde descansan restos humanos se encuentren puntos llenos de basura.
Además, se supone que, en estas fiestas de fieles difuntos como en cualquier otra festividad, personal del ayuntamiento de Umán debe estar alertas para que este tipo de detalles no se deje pasar en alto. No es sólo “tener contenta” a la gente con un evento de trova, igual es importante mantener limpio el sitio, por higiene y por respeto.
Por otro lado, es muy vergonzoso darse cuenta de que el atrio de la iglesia de Umán parece un sitio que se está dejando abandonar, con hierbas altas y sucio. Antes de seguir, surge una duda ¿el párroco de esta ciudad es igual de indiferente que el alcalde? O ¿cómo siempre los del ayuntamiento prefieren lucirse en las redes sociales haciendo como que trabajan, pero en realidad no hacen nada?
Sea cual sea la respuesta, urge que alguien (aseo urbano) haga algo al respecto y se realice la limpieza del lugar porque no es por imagen nada más, igual es por higiene y salubridad, ya se sabe la parte de los moscos y las enfermedades que estos generan, y si se tiene un atrio grande con hierbas altas, descuidado y sucio, los umanenses se convierten más vulnerables. No está de más mencionar, que no es primera vez que el atrio se encuentre en estas condiciones, es por eso que surge la duda de saber a quién le importa un comino.
Ya no perdonan los “empleados” de Ruz Guzmán, creen que por hacer una muestra de altares ya cumplieron con hacer el festejo, no es así. Esperemos que al menos al rato retiren la basura del cementerio y en el transcurso de estos días se limpie el atrio de la iglesia.